8 de mayo 2015
Fuente: PR Newswire
Investigadores penales de la Procuraduría General de la República allanaron la planta química de Grupo Celanese en Poncitlán, Jalisco en la madrugada de hoy, bajo órdenes de un juez de distrito federal. Los funcionarios están investigando violaciones de la legislación ambiental mexicana por contaminar del río Santiago y el suelo colindante con mercurio y metil-etil-cetona.
A la acción siguió una investigación preliminar por parte de la PGR, lo cual implicó la toma de muestras del río y el suelo adyacente. En un informe con fecha de 1 de abril de 2015, los investigadores de la PGR determinaron que Grupo Celanese filtró mercurio en el río en concentraciones más altas que el máximo permitido de 0,01 mg de mercurio por litro de agua. También se encontró que el suelo colindante está contaminado con mercurio y metil-etil cetona en niveles superiores a los permitidos. El río Santiago está a unos 200 metros de la planta deCelanese. Poncitlán, con unos 45.000 habitantes, se ubica a unos 80 km de Guadalajara. Colinde con el río y está a escasos 250 metros de la planta.
Celanese construyó la planta en 1947 y recientemente completó un gasoducto de 10 pulgadas de diámetro, como parte de una inversión de 55 millones de dólares para ampliar la capacidad de la planta. Según se informa, esta ampliación conllevó la reclasificación de la planta de ser una instalación de “riesgo mediana” a ser uno de “riesgo alto,” situación que culminó en una serie de disputas ambientales y de permisos con el Municipio.Celanese se amparó contra las decisiones municipales, llegó incluso hasta la Suprema Corte de la Nación, que terminó destituyendo el amparo de Celanese. La reclasificación del riesgo de mediano en alto implica la obligación de establecer una zona de amortiguamiento amplia alrededor de la planta para proteger los ciudadanos. Sin embargo Celanese aumentó la producción sin las autorizaciones de ley.
Celanese Corporation es una las 500 empresas más grandes de EEUU, con cerca de 7.600 empleados y 6,8 mil millones de dólares en ingresos. En varias ocasiones la empresa ha enfrentado en EEUU situaciones similares a lo que enfrenta en Poncitlán. Esto ha resultado en acusaciones de exportar a otros países contaminación que no quiere emitir en los EEUU. Según informes, en 1995 Hoechst Celanese resolvió pagando $ 850 millones de dólares por presuntamente ser responsable por fugas en las tuberías de fontanería de plástico en los hogares estadounidenses. En 2000 el Departamento Federal de Saludo y Seguridad Laboral (OSHA) multó a Celanesepor un accidente fatal en el estado de Alabama debido a una descomposición química descontrolada en una planta. En 2014 un juez federal de Carolina del Sur determinó que Hoechst Celanese habría vertido químicos tóxicos en las aguas subterráneas y locales de un pueblo de ese estado, poniendo en peligro la salud y disminuyendo el valor de propiedades.
