La llamada cuarta revolución ya está aquí. Con ella se pretende que todos los diferentes sectores con los que cuenta una empresa comiencen a utilizar tecnología para poder optimizar sus procesos de una manera inteligente. Desde hace unos años, la llamada industria conocida como 4.0 también ha comenzado a crecer en México cada año, aunque aún le queda terreno por conquistar. Dentro de estas innovaciones están los recursos que se basan en la inteligencia artificial, o la nanotecnología, pasando por el Internet industrial de las cosas (conocido bajo sus siglas IIoT), entre otros muchos. Todas ellas creadas con el fin de poder mejorar los procesos de producción, así como aumentarlos, pudiendo optimizar cada una de las etapas.
LAS TENDENCIAS TECNOLÓGICAS QUE SOBRESALEN EN MÉXICO
Podríamos que son unas 12 las tendencias que se demandan desde los principales sectores de producción del país que se han impulsado especialmente durante el 2020. Según plantearon los líderes de diferentes organismos empresariales en el panel Industria 4.0 que organizó la compañía tecnológica, Siemens, en el 2021 en México. En la actualidad las tecnologías que se encuentran ligadas a la inteligencia artificial, el blockchain, el big data, la nube, la ciberseguridad, la robótica, las simulaciones, los materiales avanzados, la realidad virtual y la aumentada, o el Internet de las cosas; son los que más desarrollo y demanda tienen en la actualidad.
Estas iniciativas se enfocan en grandes empresas dedicadas a la manufacturación, pero poco a poco se ha ido abriendo a otras como el retail, las empresas de servicios, o aquellas relacionadas con el entretenimiento. Siendo esta última una de las que hace más uso de muchas de estas tendencias en alza. Cuando hablamos de avances y herramientas tecnológicas aplicadas a esta industria, la lista de servicios y productos es casi interminable. Lo primero que deberíamos tener en cuenta es que los sectores y disciplinas en las que se divide son muy amplias, teniendo mucho que ver la tecnología, y su uso, para decidir cuáles de ellas forman parte de esta industria, y cuáles no.
EL ENTRETENIMIENTO, UN SECTOR CLAVE EN LA INNOVACIÓN
A grandes rasgos, el sector se compone por empresas públicas y privadas que se dedican a alguna actividad de tipo económico relacionada con la producción, en cierto modo, de cultura con un fin lucrativo. Entre los productos que se ofrecen y que han ido adaptándose a los nuevos tiempos encontramos los nuevos medios digitales, el cine, la radio, las revistas, la televisión, el teatro, los videojuegos o los juegos de azar. No obstante, según han pasado los años, estos han ido evolucionando gracias a la innovación que se ha ido incorporando en los mismos.
No olvidemos que no hace mucho que los videojuegos se encuentren dentro de la lista de bienes culturales. Incorporándose también los operadores y plataformas de juegos de azar de manera reciente a la misma. Los cuales cuentan con páginas webs y aplicaciones desde las que podemos acceder a juegos de casino como la ruleta, el póquer, el blackjack, o las populares tragamonedas de manera gratuita. Haciendo uso de las ofertas y bonos de casino con y sin depósito disponibles. Algunos de ellos además incorporan las últimas tecnologías de streaming, hacen uso del big data, o incluyen los pagos con criptomonedas basadas en el sistema de blockchain.
El impacto de la tecnología viene no solo facilita el acceso a los diferentes usuarios, sino que dota a los creadores de contenido de herramientas, que no han hecho más que ayudar a que esta industria haya seguido evolucionando y creciendo. No hay duda de que las nuevas tendencias tecnológicas ha cambiado la manera en la que vemos a esta industrias, cómo ha ocurrido con otras, y continuará haciéndolo durante los próximos años.
Si bien estas tendencias están en alza, llevando años de desarrollo, todas ellas se han ido introduciendo de una manera paulatina en los diferentes procesos y sectores. Sin embargo, aún quedan algunos retos a los que el país tiene que enfrentarse, estando entre uno de los más relevantes el decidir cuáles de estas son las más adecuadas, conociendo las necesidades de los negocios mexicanos. No olvidemos que cada industria es diferente, por lo que, algo que podría ser útil para una, puede que no lo sea para otra. Por ello, hay que saber diferenciarlas, identificando las necesidades reales.