30-Octubre-2018.
Fuente: Notimex
En aras de que las empresas mexicanas tengan la capacidad de desarrollar sus productos y migrar hacia la innovación, deben transitar de la industria de manufactura tradicional a la industria 4.0, aseguraron directivos de empresas nacionales y transnacionales de las ramas metalúrgica, aeronáutica y de tecnologías de la información, entre otras.
El viernes pasado se realizó en Querétaro el foro “Los efectos de la manufactura 4.0 en México”, en el que especialistas analizaron las perspectivas de las empresas del país en la adopción de nuevas tecnologías para modernizar sus procesos productivos.
Según la consultora Accenture, la cuarta revolución industrial podrá incrementar hasta 20% la producción global en los próximos años, una tendencia de la que México debe ser parte.
En el foro, Juan Manuel Kuri, director ejecutivo de T-Systems, hizo ver a la concurrencia que “el mundo ya cambió”, debido a que la manufactura 4.0 combina las tecnologías de la información, los datos y la analítica, para crear nuevos modelos de negocio con alto potencial, así como para establecer diferentes formas de trabajo.
Manuel Álvarez, especialista en manufactura de McKinsey and Company, comentó que el Internet de las Cosas (IoT), así como los datos y los dispositivos inteligentes han aparecido de manera acelerada y, en conjunto, son una fuente de valor y conectividad que pueden transformar los procesos industriales tradicionales.
La capacidad de cómputo es hoy muy superior a cuando se realizó el primer viaje espacial, ya que los datos actuales exceden a los generados durante años y para 2025 habrá 50,000 millones de objetos conectados.
Vencer resistencias
“Esto nos da una capacidad tremenda para tomar decisiones”, aseguró Manuel Álvarez, quien reiteró que el cambio tecnológico es una realidad, pero que debe vencer varios retos para avanzar en el país.
De entrada, se requiere de cambios culturales en las industrias, porque todavía existe “una resistencia grande” a migrar hacia la digitalización y no es solo en México, sino a nivel global, reconoció Ester Codina, directora general de Sandvik Coromant México.
Si bien las grandes industrias mexicanas se encuentran en el proceso de maduración y de manera gradual evolucionan hacia la manufactura avanzada, el mayor desafío es más visible en compañías más pequeñas porque son la que menos inversión destinan, manifestó la empresaria.
Además, Esther Codina destacó que el problema obedece a la idea de tener resultados y retorno de ganancias en el corto plazo y “es ahí donde también se debe hacer el cambio cultural”.
Más desafíos
Datos de la firma PriceWaterhouseCoopers (PwC) muestran que el continente americano tiene un nivel de digitalización de apenas 32%. Y aunque países como Alemania ya aprovechan los beneficios de la manufactura digital, en México se espera que este proceso se generalice en los próximos cinco o 10 años.
“No es tan costoso implementar los aditamentos de 4.0, como sí es tortuoso el cambio cultural que tenemos que dar como país”, coincidió el director de Desarrollo de Proveedores Industriales de la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial (Femia), Xavier Hurtado.
En esta línea de pensamiento, Juan Manuel Kuri opinó que México y otros países emergentes reciben el proceso de la manufactura 4.0 con fecha posterior a las naciones industrializadas, debido al modelo económico y la idiosincrasia de los negocios.
La falta de infraestructura de Internet es otro desafío que debe resolverse pronto, porque en poco tiempo será mayor la cantidad de dispositivos conectados y el número de datos para tomar decisiones, comentó Kuri.
Mientras tanto, Manuel Álvarez destacó que las aspiraciones y las metas de crecimiento económico se podrán cumplir sólo si se reduce la brecha digital, “porque lamentablemente tenemos en México dos mundos”.
Por un lado existen empresas capaces de competir a nivel global y, por otro, existe un rezago importante. “Si no (combatimos) ese rezago y tenemos un desempeño mucho más homogéneo, no hay forma de que podamos cumplir con las metas de productividad”, aseguró el especialista.
Educación, clave en la industria 4.0
“La (manufactura 4.0) ya no es una opción, ya la tenemos aquí”, insistió Juan Carrizales, director de Ingeniería de Fabricación de American Axle and Manufacturing AAM, quien llamó a acercar al sector productivo, la academia y los centros de investigación.
Es necesario hacer una mayor inversión en investigación y desarrollo, rediseñar los planes de estudio y dotar a los estudiantes que demandan las empresas, expresó el especialista.
Si bien México ha incrementado su inversión en investigación y desarrollo, aún destina —como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB)— 0.6% frente a 2.4% que ocupan otros países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
A pesar de lo anterior, los especialistas confiaron en que México es capaz de desarrollar una manufactura digital para tener una economía más fuerte y un desarrollo más equitativo.