Por: MTIE Gabriel Alejandro Granados / General Motors Complejo Silao / gabrielalejandro.granados@gmail.com
Hace tiempo, en Agosto del 2012 para ser exactos, escribí un artículo titulado la Educación Basada en Necesidades Empresariales, donde hablaba acerca de las competencias que los estudiantes tenían que desarrollar con la finalidad de estar preparados y cubrir los perfiles que las organizaciones necesitaban al momento de integrarse en el campo industrial. Así mismo, mencioné que las instituciones educativas deberían agregar a sus planes de estudio materias como liderazgo, trabajo en equipo entre otras, con las que apoyarían dicho desarrollo.
Hoy después de seis años, solamente algunas de las instituciones a nivel media superior y superior en Guanajuato preocupadas por los problemas de desempleo a falta de experiencia de los nuevos candidatos, vieron esta área de oportunidad e implementaron un Modelo Educativo Dual que consiste en vincular a los estudiantes con el ámbito laboral a fin de obtener la experiencia necesaria para que puedan ser empleados al término de sus estudios sin necesidad de una capacitación adicional.
LIDERAZGO y DESARROLLO PERSONAL son dos de las competencias que aún las empresas esperan encontrar en sus próximos empleados ya que éstas serán las herramientas que les permitirán aprender a ver los problemas como oportunidades de aprendizaje, crecer y reinventarse para dar respuesta a las nuevas tendencias laborales y tecnológicas, romper la brecha generacional que hay entre los Baby Boomers, Generación X , Y (Millenials) e integrar a los Centenials de la generación Z para hacer frente a los grandes cambios políticos, económicos, sociales y culturales de nuestro país, a fin de cumplir con los objetivos de la nueva industria 4.0
El LIDERAZGO puede tener un sin fin de definiciones, sin embargo, podemos describirlo como una cualidad de las personas que viven día a día los valores de honestidad, integridad y responsabilidad, personas congruentes en sus actos, creativos, hábiles para comunicarse con los demás y capaces de dar solución a problemas que se les presenten, generando nuevas ideas para la mejora de procesos. Lo anterior, resume las habilidades necesarias para lograr un LIDERAZGO capaz de persuadir a los miembros de un equipo de trabajo, conocer sus diferentes habilidades y desarrollarlas para crear equipos de trabajo más efectivos, que apoyen la productividad de las organizaciones, a fin de cumplir los objetivos planteados.
El LIDERAZGO no es saber mandar o dirigir un equipo de trabajo a base de hostigamiento o amenazas como muchos lo hacen y creen que es lo mejor, en mi experiencia eso solo crea un ambiente laboral tóxico que puede afectar la productividad, disminuye el compromiso, aleja el sentido de pertenencia y desmotiva a los empleados, reflejándose en los malos resultados.
El LIDERAZGO va más allá de supervisar, administrar o controlar el recurso humano, el LIDERAZGO debe inspirar, motivar, comprometer, proteger, desarrollar el sentido de pertenencia y hacer crecer al empleado, que todo lo que haga lo disfrute, que siempre busque la forma de hacer mejor su trabajo de manera autónoma, innovando, creando, convirtiéndose en una persona proactiva, con actitud positiva, sin resistencia al cambio, capaz de contagiar a otros para replicar el LIDERAZGO.
Lograr un LIDERAZGO ideal no es tarea fácil y debe darse por sí solo, pues se debe predicar con el ejemplo, lo que se haga será un reflejo de lo que somos. Para ser un buen líder, primero se necesita desarrollar el LIDERAZGO en uno mismo, tanto en comportamiento, como técnica y psicológicamente, así que, para llevarlo a cabo necesitamos trabajar en nuestro DESARROLLO PERSONAL, posteriormente en el profesional para crecer y poder ofrecer conocimiento, experiencia, habilidades y capacidad para trabajar con personas que piensan y actúan diferente.
Un buen líder tiene presencia, es responsable de sí mismo y de los resultados de su equipo, acepta la responsabilidad, no la evade, aprende de los errores y se gana la confianza del equipo, sabe cómo hacer las cosas, tiene habilidades, creencias, emociones y hábitos que inspiran e influyen en las demás personas sin considerarlo.
Para comenzar el proceso de DESARROLLO PERSONAL, es necesario realizar una introspección para reconocernos, saber en dónde estamos y hacia dónde queremos ir, necesitamos saber cuáles son nuestras fortalezas y debilidades para poder trabajarlas y convertirlas con la intención de desarrollar nuevos talentos que apoyen al cumplimiento de nuestros objetivos, recordando que para guiar a alguien más, necesitamos primero ser guías de nosotros mismos.
Los empleados no responden a alguien que no es congruente, que no se entregue, que no se compromete, siguen a quienes se entregan, se comprometen, cumplen y son congruentes, hoy no basta ser profesionales y delegar responsabilidades a un grupo o equipo de trabajo, se requiere SER:
Finalmente, después de reconocer nuestras habilidades e identificar las que nos faltan para llegar a donde nos hemos planteado, debemos invertir en el DESARROLLO PERSONAL y hacerlo cíclico, pues las habilidades y el conocimiento adquirido se vuelven obsoletos rápidamente, por tanto, es necesario seguir construyendo nuevas habilidades que ayuden a la formación del SER, obtener nuevas competencias para enfrentar los cambios y nuevos retos, fomentar la salud del cuerpo para poder HACER, dominar la mente para el control de emociones, fortalecer el espíritu para ESTAR bien con uno mismo y generar relaciones sanas con los demás, entregar el corazón en todo lo que hagamos para TENER buenos resultados y poder ser un referente del verdadero LIDERAZGO.Así pues, el LIDERAZGO lo hace una persona que con sus comportamientos crea y construye una cultura que trasciende e influye en las demás personas, haciéndolas responsables de sus propias acciones, de su seguridad y de su DESARROLLO PERSONAL para dar soluciones rápidas y efectivas a los diferentes problemas, potenciando así el auto-liderazgo.
ACERCA DEL AUTOR
Gabriel Alejandro Granados es Ingeniero en Sistemas Computacionales con Maestría en Tecnologías de Información Empresarial de la Universidad De la Salle Bajío, cuenta con un Diplomado y Certificación de Competencias en Educación a Distancia. Actualmente labora en General Motors Complejo Silao como Supervisor de Mantenimiento Planeado, es instructor ante la STPS, consultor informático y administrativo, socio fundador de Consultoría Empresarial e Informática, catedrático de la carrera de Producción Industrial del CECyT Guanajuato y asesor virtual en la Universidad Virtual del Estado de Guanajuato.
Correo: gabrielalejandro.granados@gmail.com