15-Agosto-2012
Por: SEDECO SLP
El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) reveló que sólo 12 ciudades del país, de un total de 77, alcanzaron un nivel adecuado o alto de competitividad.
Monterrey fue la única que logró un índice “alto”, mientras que Chilpancingo y Acapulco ocuparon los últimos lugares de la lista con un rango de “muy bajo”. El organismo destacó que Monterrey se colocó en el primer sitio a pesar de que su tasa de homicidios aumentó 300% entre 2010 y 2012.
El estudio del IMCO reveló que otras de las ciudades que se encuentran a la cabeza de la lista en competitividad son: el Valle de México, San Luis Potosí, Querétaro, Ciudad del Carmen y Saltillo.
Éstas tienen una inversión promedio por habitante ocupado de 12 mil 628 pesos y una Población Económicamente Activa (PEA) con educación superior de 23%.
De Querétaro se recalcó que logró combinar una elevada calidad de vida -en particular alto nivel de seguridad pública-, con el desarrollo de sectores como las manufacturas, el comercio y el turismo.
En contraparte, las ciudades con la competitividad urbana más baja son: Chilpancingo, Acapulco, La Piedad, Cárdenas, Poza Rica, Ensenada, Juárez, San Francisco del Rincón, Tijuana, Tehuantepec-Salina Cruz y Matamoros. En éstas, la inversión por habitante ocupado es de 4 mil 850 pesos, mientras que el PEA con educación superior es de 14%.
En el caso de Monterrey, el IMCO reconoció que esta ciudad enfrenta graves problemas de inseguridad, ya que la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes pasó de 5.3 en 2009 a 37.5 en 2011. Sin embargo, la mayor competitividad se debe a que en Monterrey se detectaron diversas fortalezas, por ejemplo, su PIB per cápita es de 247 mil pesos, el más alto del país. La productividad laboral por PEA es de 580 mil pesos, en tanto que la inversión extranjera per cápita es de 18 mil pesos.
También registra los más altos niveles en educación y medio ambiente, ya que el 100% de las aguas residuales reciben tratamiento y 98% de los residuos se disponen de manera adecuada.
En el estudio del IMCO se propuso generar los incentivos necesarios que permitan un crecimiento sustentable de los municipios.
Destacó que en los tres niveles de gobierno, se deben integrar políticas de vivienda, transporte y servicios. También planteó cobros por congestión y uso del automóvil, así como tarifas de agua y servicios que reflejen costos reales.
El IMCO planteó la urgencia de inducir la figura del administrador urbano, ya que una parte importante de las ciudades carecen de instituciones, gobiernos profesionales.
El estudio comparó a las 77 ciudades más importantes del país, las que se integran
por 364 municipios. Para la evaluación se consideraron 60 indicadores.